Se llamaba Wilson A. Bentley (1865-1931), era granjero en una pequeña aldea rural del estado de Vermont (EE.UU.) llamada Jericho, y no buscaba esposa sino conocimiento. Completamente autodidacta, fue capaz de conectar una rudimentaria cámara de fuelle a un microscopio, y tras mucho ensayo y error, logró la primera microfotografía de un copo de nieve jamás tomada en el año 1885.
Por ello, ha pasado a la historia con el sobrenombre de «Snowflake» Bentley. Si has oído el famoso dicho: «no hay dos copos de nieve iguales», deberías saber que la frase se la debemos en buena parte a su trabajo.
En el año 1903, Bentley envió 500 impresiones de sus fotos a la Institución Smithsonian, que las cuenta ahora entre las joyas de su colección. En 1931, el año de su fallecimiento, se publicó el libro «Snow Crystals» con más de 2.400 imágenes de copos de nieve tomadas por este granjero autodidacta.
Estas microfotografías, y otras 5.000 no recopiladas en el libro, evidenciaron que no existen dos copos de nieve iguales, lo cual llevó a varios científicos de la época a estudiar el trabajo de Bentley, generando mucha literatura en revistas prestigiosas como Scientific American y National Geographic.
Me enteré leyendo Boing Boing.
Buenas, no conocía la historia.
Eso sí, el título no me parece correcto. Hubo otros copos de nieve antes del que fotografió Bentley, así que no podemos hablar de «el primer copo de nieve» sino de la primera fotografía.
Tiquismiquis que es uno. 😉
En todo caso, enhorabuena por el blog!
Cierto, debería haber dicho «el granjero que fotografió por primera vez un copo de nieve». Caiga sobre mi el oprobio universal y digital 😉
Seguramente habría sido más feliz si hubiera vivido más tarde y hubiera tenido acceso a la wiki.
Supongo que querias escribir «snowflake Bentley» y se te olvido la «L»… porque a mi los copos me parecen bastante reales!! 😛
Jejeje, buena observación. Eran flakes, no de pega 😉
Me ha matado: «no buscaba esposa sino conocimiento». Hahaha, me ha gustado el artículo!
ME encantan los copos de nieve!!!
Bentley tuvo el privilegio de ser el primero en fotografiar uno pero los demás tenemos el placer de ver su fotografia.