Demasiado «familiar»

Por , el 20 abril, 2009. Categoría(s): Ciencia ✎ 6

Carlos II, el último rey español de los Austria (también conocida como dinastía Habsburgo), murió sin herederos en el año 1700 después de una breve y enfermiza vida marcada por la deformidad, la impotencia y las recurrentes micciones de sangre. Un nuevo análisis genético publicado en la edición online del 15 de abril de la revista PLoS ONE, sugiere que la culpa la tuvo la endogamia real. Los investigadores construyeron el árbol genealógico de más de 3.000 miembros de la familia Habsburgo y concluyeron que el genoma de Carlos II podría estar constituído en un increible porcentaje del 25,4% por pares de genes idénticos. El monarca, que fue el fruto del matrimonio entre un tío y su sobrina, poseía un perfil genético similar al que se obtendría de la unión de dos hermanos, debido al efecto acumulativo de varias generaciones de matrimonio entre parientes cercanos. Esta pudo ser la causa de su vulnerabilidad a un buen número de extraños trastornos recesivos, que pudieron ser la causa de su lastimosa enfermedad y muerte a la edad de 38 años. (La imagen corresponde a un retrato de mi paisano avilesino Juan Carreño de Miranda) .

Visto en ScienceShoots.



6 Comentarios

  1. Bien que ya estas de vuelta.
    Respecto al post, quiere eso decir que si una persona, digamos, del nort e de europa, tiene un churumbel con una aborigen de las isla de pascua, en la otra punta del mundo, su sangre sera bastante ffresca, quiere eso decir que el niño puede llegar a ser todo un super hombre?

    Por cierto, que paso al final con la viñeta del leon y el papa 😀 quien gano?

  2. Al margen de que uno sea o no monárquico, no cabe duda de que esa manía de la pureza de sangre en la realeza europea ha sido un gran error. Los genes plebeyos permiten vencer a trastornos como la hemofilia que tan frecuentes son en nuestros reyes. Por eso me alegro de que la familia real no siga los pasos de sus antecesores.
    Eso sea dicho con total independencia de los gustos políticos de cada cual. No es éste un foro para debatir acerca de las monarquías, ¿no es así, Maikel?

  3. Lo cierto es que hace tiempo que se sabía que las uniones endogámicas habían provocado la degeneración de los Austrias españoles. La novedad de este estudio es que calcula ese grado de consanguinidad. Estas uniones se daban, no como dice Cabezón, para mantener la pureza de la sangre (esos eran los faraones egipcios, que se casaban con sus hermanas e hijas) sino generalmente para establecer y reforzar alianzas (los mismísimos Reyes Católicos eran primos). Por cierto, NaN, las cualidades de cada uno dependen de los genes que heredamos de los padres. Si un nórdico y una mujer de la isla de Pascua tuvieran un hijo, sería casi seguro que su grado de consanguinidad sería prácticamente 0, porque su antepasado común más reciente habrá vivido hace miles de años, pero en absoluto tendríamos asegurado un superhombre. Seguramente sería un tipo más bien normalito… que se dejaría una pasta todos los años en billetes de avión para visitar a la familia.

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Por maikelnai, publicado el 20 abril, 2009
Categoría(s): Ciencia