Monsanto y la FDA, primas hermanas

Por , el 10 diciembre, 2008. Categoría(s): Educación/Opinión ✎ 15

Prosigo leyendo el libro de M.M. Robin sobre el amplio historial mafioso de Monsanto, y en el episodio dedicado al rBGH (la hormona del crecimiento bovino) y a las maniobras de la empresa de St. Louis para que este producto – el primer medicamento transgénico para animales – fuese aprobado a toda prisa, descubro el caso del veterinario Richard Burroughs.

En todos estos años que llevo traduciendo e interesándome por noticias científicas, hay una siglas que siempre me han aportado confianza: FDA. Ayer mismo hablaba de esta institución, alabando su sentido común, en el post sobre la pistola medicamento. Pero el libro de la señora Robin ha hecho que mi confianza en el organismo estadounidense encargado de regular la salida al mercado de fármacos y alimentos, se vaya al traste en una sola noche.

Volvamos al caso de Richard Burroughs. Este veterinario fue fichado por la FDA en 1979, y se incorporó al Centro para Medicina Veterinaria. Poco después se le encargó que estudiara la solicitud de Monsanto para la aprobación de la hormona del crecimiento bovino. Esta sustancia, sintetizada artificialmente por primera vez, aumentaría la producción láctea de las vacas hasta un 15%, pero Burroughs era escéptico ya que pensaba – acertadamente – que el producto acabaría rápidamente con las reservas naturales de la vaca (debilitando sus huesos por la pérdida de calcio que se va a la leche, por ejemplo) y provocando un aumento considerable en la incidencia de mamitis. Si las vacas desarrollan esta infección en las mamas, el pus se mezcla con la leche, por lo que los animales deben ser tratadas con antibióticos – que también van a parar a la leche. Sea como sea la idea no le parecía acertada a Burroughs, que además se había dado cuenta que Monsanto había omitido voluntariamente en sus informes esta información sobre efectos secundarios en las vacas (por no hablar del tremendo síndrome de abstinencia que sufren las vacas – el crack de la vaca lo llaman – cuando se les deja de inyectar la hormona).

Es entonces cuando descubro unas cuantas cosas sobre el funcionamiento del FDA.

1) Aunque parezca mentira, la FDA no realiza sus propios estudios o análisis, sino que se limita a estudiar la documentación que los fabricantes le facilitan. No hace falta decir que lo que pretenden los fabricantes es vender y hacer dinero, por lo que la tentación de manipular está siempre presente.

2) La FDA tiene que emitir por ley un dictamen sobre el nuevo producto a los 6 meses de recibir la documentación. Como táctica, empresas como Monsanto envían montañas de informes confiando en que los reguladores miren por encima los resúmenes.

3) Y más sangrante. En Estados Unidos existe lo que llaman «política de puertas giratorias» que permite un trasvase de personal entre instituciones públicas como la FDA y las empresas a las que controlan, como Monsanto. Así pues, es bastante habitual que las personas que evalúan la idoneidad de un producto antes de su llegada al mercado, hayan trabajado previamente en la empresa que lo fabrica, y que una vez logrado el objetivo, regresen a la empresa privada.

Visto lo visto, no es para nada extraño que nuestro buen amigo Burroughs, cuyo único pecado fue ser escéptico y velar por los intereses del consumidor, fuese puesto de patitas en la calle por la FDA (acusado de incompetencia) en cuanto comenzó a requerir estudios serios a Monsanto y les pidió que le facilitaran la información deliberadamente omitida.

Eso es solo el comienzo, Monsanto consiguió también el respaldo de la FDA para que las empresas lácteas que no inyectan esta hormona transgénica a las vacas no puedan libremente colocar una etiqueta anunciando que la leche está libre de somatotropina bovina, puesto que esta hormona se produce también de forma natural por la hipófisis de las vacas (a niveles mucho menores claro está). Y si la empresa láctea en cuestión aclara de alguna forma que sus vacas no son dopadas, para tranquilidad del consumidor estadounidense, Monsanto les obliga a colocar una coletilla que sostiene que la «FDA no ha encontado diferencias significativas en la calidad de la leche producida por vacas tratadas con o sin rBGH» (véase foto).

Tranquilos, la Unión Europea prohibió el uso de esta hormona desde el 1 de enero del 2000, citando su toxicidad en vacas y humanos, gracias a una investigación – verdaderamente independiente – realizada en… Canadá. Pero me ha resultado realmente descorazonador leer en el libro de Marin como varios granjeros, científicos y periodistas estadounidenses (perseguidos y presionados por una empresa que se aprovecha de un sistema legal injusto, donde el dinero lo puede todo) afirman entre lágrimas que el país que presume de ser «la tierra de la libertad», es en realidad esclavo de sus poderosas corporaciones.

En fin, otra venda en los ojos que se me cae.



15 Comentarios

  1. Monsanto es la empresa que más miedo le tengo en el mundo…. más que a las petroleras y otras industrias con tintes mafiosillos…

    Offtopic: Podrías eliminar el filtro de hotlinking para los lectores del feed? Podrías permitir hotlinking desde los dominios: reader.google.com, bloglines.com, netvibes.com y similares, para que podamos ver las imágenes desde nuestro lector feeds, se agradecería 🙂

  2. Hay 3 documentales muy buenos sobre coorporaciones que deberías ver. Ahí se trata el tema este, desde otra perspectiva, que a mí me sobrecoge más todavía. Lo que no recuerdo es en cual de ellos salía el tema.

    Título original 1: The Corporation: The Pathology Of Commerce.
    Título original 2: The Corporation: Planet Inc.
    Título original 3: The Corporation: Reckoning.

    También están español.

  3. Muy buen artículo. Monsanto ha hecho estragos en Argentina (y los sigue haciendo) gracias a su facilidad para convencer a nuestros incorruptibles gobernantes. Es una tristeza muy grande, y es bueno que se publiquen estas cosas.

    PDA: Por favor, habilita a Google Reader en el filtro de hotlinking, porque da bronca no poder ver las imágenes desde el lector de feeds.

  4. Me encanta su blog, lo leo con bastante frecuencia.

    Interesantísimo artículo, como otros tantos

    Una cosa más, estoy suscrito a los posts de su blog, pero hoy (otras veces también pero no me he dado cuenta?) me ha recibido una imagen en la cabecera, invitandome a que le bese en el culo… Curiosa manera de tratar los suscriptores.

    Aparte de eso, espero poder seguir leyendolo.

    Un abrazo

    http://www.maikelnai.es/wp-content/uploads/2008/12/etiqueta-con-la-nota-de-la-fda.jpg
    http://img184.imageshack.us/img184/5876/etiquetaconlanotadelafdky8.jpg

  5. Justo antes de leer me había tomado un vaso de leche con Colacao, así que imagínate como se me ha puesto el estómago al leer que la pus se mezcla con la leche, y si se les trata, se mezclan los antibióticos… menos mal que he seguido leyendo y he visto la parte que dice que en la unión europea eso está prohibido desde hace casi 9 años…

    Yo no entiendo como puede haber gente que juega con la salud de los demás sólo por dinero. Son peores que los asesinos.

  6. Busco un grupo de granjeros o otros en Uruguay que quierren reunir para bloquear la destruccion que ya esta haciendo Monsanto en este pais. Uruguay era para mi el ultimo refugio cuando me fui de EEUU en 2009. La pesadilla jamas se detiene.

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Por maikelnai, publicado el 10 diciembre, 2008
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